Estudio de Criteo resalta el fenómeno creciente de los “viajeros sostenibles”

Brasil es el séptimo país del mundo con más “viajeros verdes”: el 16% de los viajes aéreos que se cancelan o no se llegan a concretar en Brasil obedecen a motivos relacionados con la sostenibilidad del planeta.

El mundo reacciona ante el fuego que devasta el Amazonas, la joven activista sueca Greta Thunberg cada vez tiene más seguidores y las marcas lanzan campañas de publicidad para preservar los océanos. En este contexto, una parte pequeña pero creciente de la población mundial ha decidido reducir al máximo su huella de carbono. Y una de las formas más populares de hacerlo es modificando su manera de viajar. Se trata de una nueva tendencia que una reciente investigación de Criteo ha sacado a la luz: el viajero sostenible (“green traveler”).

Criteo ha estudiado a más de 13.000 viajeros para averiguar las razones por las que se cancela un viaje o simplemente nunca se llega a reservar. Así ha descubierto el fenómeno en auge de los viajeros sostenibles: aquellos que al menos una vez en los últimos 6 meses han decidido no viajar, con el propósito de minimizar su huella de carbono.

Brasil es el único país latinoamericano que integra el ranking de las 10 naciones con mayor cantidad de viajeros verdes. Ocupa el 7° puesto, por detrás de Alemania, Francia, EE.UU., España, Reino Unido y Australia. El estudio de Criteo revela que el 16% de los brasileros que han decidido no volar o cancelar sus planes de viaje en los últimos 6 meses lo han hecho para contribuir, de alguna manera, al bienestar del planeta.

Fuente: Criteo Travel Study, mayo-junio de 2019 (N = 13.188 | Viajeros sostenibles: N = 783).

El perfil del viajero sostenible

Según datos de Criteo, los viajeros sostenibles son mucho más jóvenes que la media: un 62% es millennial o pertenece a la Generación Z, mientras que estos solo componen el 41% de los viajeros tradicionales. Además, 8 de cada 10 viajeros sostenibles han reservado pasajes de tren en los últimos 6 meses, una alternativa mucho más ecológica que el avión. Sin embargo, solo un 56% de los viajeros tradicionales han optado por el tren en este período de tiempo.