Motivación, el diferenciador en la experiencia del empleado

La motivación se ha transformado en un factor clave para obtener mejores resultados

El compromiso que demuestran los empleados con una organización, su productividad y su contribución a la mejora del ambiente laboral tienen relación directa con la motivación, un aspecto que adquiere cada vez mayor importancia entre las variables que manejan las compañías y, más específicamente, los departamentos de Recursos Humanos.

Por esa razón es que en las estrategias de Employee centricity que vienen incorporando las empresas se pone especial foco en lograr un mayor entendimiento de lo que sienten los empleados, de sus expectativas, intereses y necesidades, para diseñar de este modo políticas orientadas a mejorar su motivación y su experiencia.

Aunque existen factores generales que influyen en la motivación, escuchar y conocer las expectativas personales de los empleados permite planificar acciones mejor adaptadas a sus necesidades, a través de la personalización y segmentación. En ese sentido, existen herramientas como encuestas y entrevistas que pueden utilizarse para medir la motivación. También se puede utilizar el análisis de indicadores indirectos como los índices de rotación, ausentismo, productividad.

Pero la herramienta más potente es la observación y la escucha. Los responsables de los equipos de trabajo, los profesionales del área de Recursos Humanos en la interacción cotidiana con los empleados juegan un rol fundamental en la valoración del nivel de motivación.

La necesidad de las organizaciones de adaptarse a contextos cada vez más competitivos y dinámicos ha hecho que los empleados pasen a ocupar un lugar central en las estrategias corporativas, y las empresas son cada vez más conscientes de la importancia de la motivación en el logro de los objetivos.

También ha aumentado la comprensión de que, más allá del salario, hay otros factores que influyen en esa motivación: reconocimientos, cultura organizacional, contenido del puesto de trabajo, flexibilidad, desarrollo y autonomía, entre otros.

La desmotivación o descontento impacta negativamente en muchos aspectos de las compañías: mayores índices de rotación y ausentismo, deterioro del ambiente laboral, pérdida de talento clave, menor productividad, mayores costos. Son todos factores que terminarán conspirando contra la actividad de la empresa.

Un aspecto importante es la tecnología, con la que, mediante herramientas de HR Analytics. se pueden detectar riesgos, agilizar la toma de decisiones, identificar personas claves, y personalizar o segmentar acciones de recursos humanos. Además, contribuye a mejorar la comunicación entre la empresa y el empleado, a través de redes sociales corporativas y otros medios que promuevan una comunicación continua y bidireccional, que fomenten y faciliten la participación de los empleados.

Maribel Cano, Latin America Marketing Manager de Meta4, declara que “aunque existe una estandarización de los momentos clave o críticos que más inciden en las emociones de los profesionales como el momento de la selección, contratación, el primer día de trabajo, el periodo de incorporación, el día a día, el desarrollo profesional, o la desvinculación, resultará de gran utilidad que cada organización realice un análisis de los momentos que más pueden afectar a un empleado en función de sus características. El diseño de su propia curva de experiencia permitirá detectar los puntos fuertes o débiles que viven los colaboradores durante su recorrido y trabajar sobre ellos, lo que sin duda marcará la diferencia en su experiencia como empleado de la organización”.