A finales de 2024, el Banco de la República de Colombia tomó medidas para ajustar la tasa de interés. Decidió reducir la tasa y situarla en 9,5%. Esta decisión se basó en el comportamiento de la inflación y otros indicadores económicos relevantes. Posteriormente, en enero de este año, la Junta Directiva resolvió mantener inalterada la tasa de interés haciendo una pausa en los recortes que venían desde el 2023.
Frente a esta volatilidad, el inicio de año es ideal para que los colombianos empiecen a considerar las opciones más convenientes para adquirir bienes de alto valor, como lo es un vehículo nuevo. Es fundamental evaluar las diferencias entre el autofinanciamiento comercial y la financiación tradicional, especialmente en términos de costos a corto y largo plazo.
Cuando las personas deciden adquirir un bien que representa una gran inversión, casi siempre piensan en un crédito bancario; sin embargo, no es la única opción disponible en el sector. Actualmente, existen diferentes alternativas como el autofinanciamiento comercial, que es una opción conveniente a corto plazo en comparación con un crédito bancario.
Según Leopoldo Romero, CEO de ChevyPlan Colombia, “en lugar de recurrir a métodos convencionales de financiación que pueden generar cargas monetarias significativas, los Planes de Ahorro Programado, permiten a los usuarios planificar y ahorrar de manera estructurada, facilitando la adquisición de un vehículo sin las presiones de los altos intereses, afirmó Romero. “Esta alternativa no solo promueve solidez, sino que también fomenta una cultura de ahorro, economía colaborativa y planificación a corto plazo”.
¿Qué es el autofinanciamiento comercial?
El autofinanciamiento comercial, es un sistema de ahorro, mediante el cual se conforman grupos de personas que contribuyen a un fondo común para la adquisición de bienes o servicios y realizan aportes de forma periódica. En ese sentido, es una alternativa de economía colaborativa, que facilita a las personas, adquirir, en este caso, vehículos nuevos o usados casi nuevos, a un menor costo por transacción.
Las personas interesadas se suscriben a un plan de ahorro programado con un plazo determinado y realizan aportes de manera mensual, sin intereses. Esto les permite participar en la asamblea de adjudicación mensual y resultar adjudicados, obteniendo su vehículo, antes de finalizar el plazo acordado.
Esta alternativa, propuesta por empresas como ChevyPlan, ofrece planes accesibles que se ajustan a las capacidades de cada cliente y que, a través de la planeación, la perseverancia y el foco en su meta, adquieren ese bien que están buscando, sin sobre costos financieros y con ahorros importantes comparados frente a una entidad bancaria.
¿Qué es la financiación tradicional?
La financiación tradicional implica obtener un préstamo a través de un banco o una cooperativa de crédito, para cubrir el costo de la compra de un bien o servicio.
Continuando con el ejemplo de comprar un vehículo, en este caso, el interesado solicita un crédito a una entidad financiera y realiza pagos mensuales que incluyen tanto el monto prestado como los intereses que, en muchas ocasiones, son bastante altos.
Esta alternativa, al estar sujeta a las tasas de interés, podría aumentar de manera significativa el costo de la compra a largo plazo. Sin embargo, como ventaja, el vehículo es entregado de manera inmediata al comprador.
¿Qué convienen más a largo plazo?
La respuesta depende de varios factores: hábitos financieros, la capacidad de ahorro y las necesidades personales. Pero lo más importante es que si se es disciplinado con las finanzas y no se quieren pagar sobre costos para la adquisición de un bien que puede programarse, el autofinanciamiento comercial puede ser una excelente alternativa y una decisión inteligente financieramente.
Si su propósito es adquirir un vehículo mediante este método, lo invitamos a visitar la página web de ChevyPlan.