En un contexto en el que la industria de los videojuegos ha tomado más relevancia debido a la pandemia, los e-Sports también lo han hecho. Games Industry (una de las páginas más influyentes sobre videojuegos a nivel mundial), resalta que tanto los eventos deportivos como la industria del cine se vieron perjudicados debido a la falta de asistencia a estadios y a salas de cine. Esto permitió que la industria de juegos y deportes en línea creciera un 20% respecto al año 2019 en todo el mundo, hasta llegar a la cifra de 174 mil millones de dólares en ventas, tanto en hardware como en software. Así que si usted es un usuario gamer aficionado principiante y quiere participar en torneos de e-Sports, como la AMD Red League, por ejemplo, pero aún no sabe con qué herramientas debe contar para obtener el primer lugar, acá le traemos algunas recomendaciones de expertos para lograrlo.
Lo más importante es tener un equipo que garantice el máximo rendimiento y que permita la mejor calidad de las imágenes, pues así logrará una mayor precisión en sus movimientos. Para garantizar esta calidad ultra en los videojuegos es importante, principalmente, un buen procesador, un mainboard y una tarjeta gráfica. AMD ofrece los Procesadores de Escritorio AMD Ryzen 5000, que ofrecen una experiencia de inmersión única y dominan todas las tareas de varios procesos, como el renderizado de video 3D y la compilación de software.
A su vez, se debe tener en cuenta que los Procesadores AMD Ryzen™ 5000 Serie G ofrecen los gráficos más veloces que se pueden encontrar en un procesador para computadores de escritorio, aunque también se pueden combinar con una tarjeta gráfica externa para acelerar el rendimiento en los juegos. Esta última cumple un papel indispensable para los gamers porque de acuerdo con su calidad se podrá jugar a altas velocidades de cuadro y se tendrán resoluciones de imagen a 4K, convirtiéndose en la mejor tecnología del mercado. Para esto AMD cuenta con las Tarjetas Gráficas AMD Radeon™ Serie 6000; su diseño e ingeniería vanguardistas permiten que esta familia ofrezca velocidades de cuadros ultra-altas en compañía de la tecnología AMD Infinity Cache y una enorme cantidad de memoria GDDR6, que permitirán vivir la mejor experiencia de juego.
A su vez, para obtener un impulso en los frames para los juegos, AMD FidelityFX Super Resolution (FSR) utiliza tecnologías de escalamiento de vanguardia para ayudar a aumentar su velocidad de cuadros en títulos seleccionados y brindar experiencias de juego de alta calidad y alta resolución, sin tener que actualizar a una nueva tarjeta gráfica. Así, los títulos contarán con un 70% más de rendimiento y una calidad de imagen insuperable. También está la opción del AMD FidelityFX, el cual cuenta con un sólido conjunto de efectos de mejora visual optimizados para los gráficos móviles AMD Radeon™ RX 6000M que permiten una gran cantidad de efectos de iluminación, sombras y reflejos rasterizados en los juegos más recientes con una sobrecarga de rendimiento mínima.
Teniendo en cuenta lo anterior, AMD destaca cómo lograr el primer lugar en juegos como Counter Strike: Global Offensive (CS:GO), Valorant, Call of Duty o Fortnite, de la AMD Red League, gracias a los procesadores y tarjetas gráficas más potentes del mercado:
1. CS:GO – VALVE CORPORATION (1999): es el legendario juego de acción por equipos del género disparos en primera persona (FPS, por sus siglas en inglés) y es el cuarto de la saga Counter-Strike. Cuenta con la misma mecánica que sus antecesores, aunque con algunos nuevos modos de juego. CS:GO es el protagonista de los torneos de videojuegos competitivos y se han vendido más de 25 millones de copias en todo el mundo. CS:GO promete ampliar la aclamada jugabilidad de Counter Strike y ofrecerla a los jugadores de PC, así como a los de las consolas de última generación y Mac. Para este juego se recomienda contar con un Procesador AMD Ryzen 5 5600X y una tarjeta gráfica AMD Radeon™ RX 6700 XT.
2. Valorant: es un videojuego de disparos en primera persona multijugador gratuito, 5v5, desarrollado y publicado por Riot Games, donde un equipo ataca y el otro defiende. El objetivo del grupo atacante es colocar una bomba (llamada pincho) y hacer que detone, mientras que el equipo defensor intenta evitarlo. Si un escuadrón es eliminado antes de que se cumpla cualquier otra condición de victoria, el contrario ganará. Para este tipo de juego se recomienda contar con un Procesador AMD Ryzen™ 9 5900 X y una Tarjeta Gráfica Radeon 6800XT, ya que está diseñada para alcanzar velocidades de cuadros ultra altas y jugar en 4K con una calidad deslumbrante.
3. Call of Duty Warzone: este es un videojuego de acción de disparos en primera persona de estilo bélico, del tipo Battle Royale para PC, PlayStation 4 y Xbox One. La saga está ambientada en la Segunda Guerra Mundial y basada en hechos históricos. Para este tipo de juego es indispensable contar con un Procesador Ryzen 9 5950X, ya que está preparado para trabajar con las motherboards serie 500 y alguna serie 400, con una simple actualización del BIOS y se pueden ajustar y optimizar con Ryzen Máster y AMD StoreMI.
4. Fortnite: este es un Battle Royale con disparos en tercera persona. El juego consiste en pelear contra olas de enemigos, controlados por una inteligencia artificial, llamados Husks. El jugador puede estar en un equipo con otros tres jugadores, solo con un equipo de bots o puede incluso desactivar los bots para tener una experiencia completamente en solitario. En compañía de Fidelity FX Super Resolution este título cuenta con un 70% más de rendimiento y una calidad de imagen insuperable.
Además de tener un buen procesador y tarjeta gráfica, se debe contar mínimo con una memoria entre 8 y 16 gigas de RAM y un disco duro de una o dos teras. También es recomendable tener una pantalla de al menos 2K, 1440P y mínimo 120Hz y la fuente de poder, es decir, la fuente energía para los componentes, debe conseguirse a partir de 700 watts. Con estas características, cualquier gamer aficionado que quiera emprender el camino de los e-Sports estará muy bien equipado para obtener el primer lugar en las competencias.