Diez formas de mantener un equilibrio saludable en la vida de los jugadores

Los juegos son una excelente manera de relajarse después de un duro día de trabajo, conectarse con amigos y aprender nuevas habilidades. También lleva a los jugadores en un viaje a una nueva realidad donde pueden crear sus propios personajes y mundos. Se anima a los entusiastas de los juegos a asumir diferentes roles y trabajar en equipos para resolver problemas o desbloquear nuevos niveles, especialmente cuando juegan juegos de estrategia. En un estudio de 2 mil niños, los investigadores encontraron que los jóvenes que juegan videojuegos durante tres o más horas al día muestran una mayor actividad en segmentos del cerebro asociados con la atención, la memoria y las tareas cognitivamente exigentes.

Pero, al igual que las redes sociales, los juegos también pueden interponerse entre las rutinas y las necesidades diarias, como un horario de sueño saludable o los estudios. Los juegos y la salud mental están estrechamente relacionados, y los jugadores sanos son jugadores felices.

“Los juegos son una forma divertida de desahogarse o relajarse después de un largo día de trabajo o escuela. Jugar juegos puede mejorar la creatividad y fomentar el trabajo en equipo o las habilidades para resolver problemas. Sin embargo, los jugadores deben conocer sus límites e implementarlos para evitar que los juegos se conviertan en algo más que un pasatiempo divertido. Al establecer límites de tiempo o tener un espacio de juego separado, los jugadores pueden crear un espacio entre su vida diaria y el mundo virtual”, asegura Acer, quien se mueve en el segmento con sus líneas Predator y Nitro e iniciativas que han reunido a los mejores jugadores del mundo.

Consideremos cómo equilibrar los juegos y la vida para mantener nuestros cuerpos y mentes en plena forma.

Establecer límites: establecer una rutina de juego saludable es crucial para garantizar un equilibrio positivo. En lugar de tomar el control cuando lo deseen, los jugadores pueden programar tiempo para jugar y otras tareas como la tarea, comer una comida nutritiva o hacer ejercicio. Establecer límites ayuda a mantener fresca la experiencia de juego y permite descansar entre sesiones, lo que da tiempo a los músculos y reflejos para repararse. Permitir que el tiempo de juego sin restricciones se filtre en la vida diaria puede provocar sentimientos de estar fuera de control e impactar negativamente en nuestro espacio mental.Los límites físicos también son importantes. Un espacio de juego dedicado ayuda a evitar límites borrosos entre los juegos y otras tareas de la vida. Por ejemplo, jugar en la cama o en el sofá puede significar que no tenemos un límite claro entre el tiempo de juego y el tiempo de dormir, lo que significa que tenemos dificultades para descansar bien por la noche. Un espacio separado nos ayuda a ser más disciplinados con nuestros hábitos de juego y nos permite trazar una línea entre los juegos y otras actividades”, dice Acer, quien ha estudiado los comportamientos de los gamers y es un jugador esencial en el mercado.

Establecer un límite de tiempo: puede parecer que tenemos cientos de cosas en nuestra lista de tareas pendientes. Nuestra vida diaria incluye compromisos escolares o laborales, tiempo en familia y dormir lo suficiente. Además de límites estrictos, también deberíamos establecer un límite de tiempo para jugar para asegurarnos de que podamos hacer malabarismos con nuestras otras tareas. Es fácil excederse o perderse en mundos de fantasía y convencernos de jugar un juego más antes de dejar el control. Limitarnos a un determinado tiempo de juego cada día puede ayudarnos a ser más organizados y productivos en otras áreas de la vida.

Establecer un límite de tiempo podría incluir investigar cuánto durará una partida o configurar una alarma para indicar cuándo hemos alcanzado nuestra cuota de tiempo diaria.

Tome descansos regulares entre juegos: los descansos regulares son cruciales para ayudar a nuestro cuerpo a recuperarse entre sesiones de juego intensas. Al igual que estudiar concentrado antes de los exámenes, los períodos de juego prolongados e ininterrumpidos pueden dañar nuestros ojos y músculos. Tomar descansos regulares para jugar y permitir que nuestros músculos descansen puede mejorar nuestras habilidades de juego y tiempos de reacción. Además, levantarse y estirarse o moverse entre sesiones mejora el flujo sanguíneo y la circulación, lo que nos hace sentir llenos de energía y listos para la siguiente ronda de juegos.

 Dormir lo suficiente: dormir es una necesidad humana básica y es crucial para nuestro bienestar general. El sueño inadecuado puede dejarnos de mal humor y ansiosos y puede provocar problemas de salud crónicos como enfermedades cardíacas, diabetes y presión arterial alta. Sentirse cansado o quedarse dormido a intervalos aleatorios durante el día podría indicar una deficiencia de sueño. Dormir entre 7 y 8 horas cada noche puede mejorar nuestra capacidad para combatir los gérmenes y las enfermedades, curarnos y repararnos, y apoyar el crecimiento y el desarrollo de los niños. Los jugadores deben mantener una buena higiene del sueño para tener una mente y un cuerpo sanos y mejores sesiones de juego.

Limitar el gasto monetario en juegos: los desarrolladores de juegos pueden lanzar versiones gratuitas de un juego; realizar compras dentro del juego para acceder a áreas que normalmente están restringidas; desbloquear nuevos niveles; recibir vidas ilimitadas o mejorar personajes. Los gastos relacionados con los juegos incluyen compras únicas conocidas como micro transacciones para mejoras adicionales como más poder o vidas. Las suscripciones a largo plazo incluyen una tarifa mensual o anual para jugar. Aunque no parezca mucho, estos costos pueden acumularse, especialmente cuando se considera el precio de equipos como auriculares o controladores adicionales. Los padres pueden utilizar los gastos del juego para enseñar a sus hijos sobre cómo hacer presupuestos y ser autodisciplinados. Los jugadores adultos deben crear un presupuesto y limitar sus gastos en juegos para evitar tener que hacer sacrificios financieros en otros lugares.

Juego con amigos u otras personas: los juegos no tienen porqué ser solitarios: pueden ser un evento social y brindar oportunidades para conocer gente de todo el mundo. Los jugadores automáticamente tienen algo en común, lo que hace que sea más fácil romper el hielo y hablar con la gente. También brinda un sentido de pertenencia a una comunidad y permite a los jugadores hablar sobre los problemas que enfrentan, intereses comunes o cómo mejorar sus habilidades de juego. Además, los compañeros de juego pueden ayudarnos a mantenernos responsables recordándonos nuestros límites de tiempo o tomando descansos regulares.

Haz amigos fuera de los juegos: los círculos de amistad fuera de los videojuegos también son importantes. Además de darnos aliento y apoyo emocional cuando lo necesitamos, los amigos nos dan oportunidades para salir y explorar nuevos lugares. Las amistades contribuyen a nuestro bienestar general al reducir nuestros sentimientos de soledad, ayudarnos en momentos estresantes y hacernos responsables de hábitos de vida poco saludables. Es fantástico rodearnos de personas de un entorno o grupo de edad similar, ya que pueden comprender nuestros pensamientos y sentimientos. Los amigos fuera de la comunidad de jugadores nos brindan experiencias diferentes y nos recuerdan que hay un mundo más allá de nuestras pantallas.

Tener un pasatiempo fuera de los juegos: demasiado de algo bueno puede resultar aburrido después de un tiempo, y los juegos no son una excepción. Además de tomar descansos regulares, tener pasatiempos además del juego puede ayudarnos a relajarnos y aliviar el estrés. Los pasatiempos también nos animan a socializar y conocer gente nueva mientras hacemos las cosas que amamos. A través de los pasatiempos, podemos volvernos más seguros y creativos, lo que nos brinda una sensación adicional de logro fuera del mundo de los videojuegos.

Recuerda divertirte: los juegos deben ser divertidos e interactivos. Si empieza a parecer más una tarea ardua, puede que sea el momento de dar un paso atrás, tomar un descanso o emprender un nuevo pasatiempo. Aunque alcanzar nuevos niveles o vencer a amigos en un juego puede ser gratificante, también deberíamos jugar por diversión. Tomarnos demasiado en serio puede ser estresante y provocar agotamiento en los juegos, por lo que es importante tomar descansos regulares, experimentar la vida y divertirnos lejos de la pantalla.

Reconoce la adicción a los videojuegos y aprende a buscar ayuda: las adicciones a los juegos pueden ser difíciles de abordar porque jugar juegos tiene un beneficio social adicional. Es fácil hacer pasar una adicción por pasar tiempo con amigos o hacer algo que amamos. Sin embargo, tener una fuerte conciencia de uno mismo es clave para reconocer la adicción. Si amigos o familiares mencionan nuestros hábitos excesivos de juego, o si elegimos tomar nuestro control en lugar de dormir o pasar tiempo con otras personas, puede ser el momento de preguntarnos si nuestros hábitos de juego son saludables o no. El juego excesivo puede afectar la salud mental y es importante comunicarse con sus seres queridos o profesionales si sospechamos de una adicción.