Hay una gran diferencia entre consumir contenido digital pasivo por entretenimiento e invertir tiempo frente a una pantalla de forma constructiva y activa.
La creación de tecnología es una de esas habilidades clave que los niños deben dominar para poder enfrentar los retos del siglo XXI.
En los últimos años, y especialmente ahora con la pandemia y las clases virtuales, muchos padres se han cuestionado el impacto del tiempo en pantalla en la salud tanto física como mental en niños y adolescentes. Es por esta razón que, Crack The Code, plataforma especializada en educación tecnológica para niños y jóvenes recién llegada a Colombia, hace un llamado a los padres de familia y tutores que consiste en monitorear más allá de la cantidad, la calidad del tiempo que sus hijos pasan en la pantalla y la interacción educativa que puedan tener con esta.
La falta de información hace que los padres de familia y tutores no tengan claro como manejar la exposición a la tecnología y dispositivos en los niños desde edades muy tempranas. “Es fundamental generar conciencia en los padres y tutores sobre las consecuencias que tiene el mal uso de la tecnología y los dispositivos, así como el sano equilibrio entre el contenido de calidad y la interacción con el entorno físico para un apropiado desarrollo de la población infantil y adolescente”, dijo María del Mar Vélez, CEO de Crack The Code.
Existen dos tipos de consumo de internet, el primero es pasivo que consiste en navegar por Internet y las redes sociales, videos, chats, juegos, ocio y entretenimiento, por otra parte el consumo activo donde el niño puede aprender y desarrollar habilidades claves como el desarrollo del pensamiento crítico, la creatividad, y la resolución de problemas. Esto lo hacen al crear proyectos digitales como páginas web, videojuegos o apps, es importante que los niños aprendan mientras se divierten.
Un reciente artículo publicado por The New York Times, habla de la recomendación de la American Academy of Pediatrics (AAP), donde hablan de “Las Tres Cs”: content (contenido), context (contexto), children (niño), como guía clave para ayudar a los padres y a los tutores a comprender cómo manejar y negociar el tiempo en pantalla de sus hijos. Los puntos clave son:
• Encontrar contenido educativo y apropiado para el desarrollo del niño: contenido que promueva el uso activo de la tecnología
• Proporcionar un contexto que promueva el aprendizaje y la conversación.
• Considerar las necesidades de cada niño en particular.
Es fundamental que los niños desarrollen habilidades por medio del contenido que estén consumiendo de acuerdo a su edad, asimismo es aún más relevante que sus padres promuevan y utilicen ese tiempo frente a la pantalla con este fin.
La creación de tecnología es una de esas habilidades clave que los niños deben dominar para poder enfrentar los retos del siglo XXI, con la que estos dejarán de ser espectadores pasivos y se convertirán en creadores activos de esta herramienta. “Es importante que tanto los niños como los padres se den cuenta que la tecnología es una herramienta de creacion y creatividad muy potente que les va a permitir entender y crear soluciones que van a mejorar y cambiar todas nuestras vidas.”, agregó Vélez.
Teniendo en cuenta este largo período de confinamiento por la coyuntura actual, las actividades educativas, sociales y de esparcimiento suman bastantes horas frente a las pantallas y es de suma importancia lograr que, pasada la crisis, los niños y adolescentes aprendan a convivir encontrando un equilibro virtual/físico de una forma saludable y adecuada.