2020 fue un año repleto de cambios en todos los aspectos de nuestras vidas, incluyendo a los más pequeños, quienes tuvieron que asumir nuevos retos y aprendizajes en su día a día y cambiar su entorno, como el espacio educativo y sus procesos de aprendizaje.
Según un estudio elaborado por Kahoot! (en inglés) y publicado después del confinamiento, en el que se encuestó a más de 1 ,000 profesores, la parte más difícil del cambio hacia la educación a distancia para un 64 % de los encuestados fue la falta de contacto social con sus estudiantes, así como ver a estos motivados. Junto a estos datos, 3 de cada 4 profesores que respondieron creen que sus estudiantes sacaron algo positivo del aprendizaje virtual durante el cierre de las escuelas.
Ante este escenario y teniendo en cuenta que la educación en casa seguirá siendo, en mayor o menor medida, una realidad en los próximos meses, Kahoot! ha identificado 5 lecciones aprendidas por los profesores Latinoamericanos y españoles, después unos meses de haber asumido y superado diversos retos en los procesos educativos.
1. Desarrollar las habilidades de colaboración e interacción de los estudiantes como tarea fundamental
Durante el confinamiento hemos tomado conciencia de la importancia que tiene para nosotros interactuar con nuestro entorno, un fenómeno muy significativo en la socialización de los niños, para quienes es fundamental relacionarse con sus compañeros durante el proceso de aprendizaje. “Las herramientas de colaboración han sido de vital importancia durante el aprendizaje a distancia”, comenta Rubén Benet, profesor en el Colegio Internacional de Levante y CEU UCH de España, “y este tipo de instrumentos han llegado para quedarse, ya que ayudan a los estudiantes a desarrollar sus habilidades de trabajo en equipo a lo largo de todo el proceso de aprendizaje”.
2. Usar métodos de enseñanza sencillos pero que motiven a los estudiantes
Otro de los desafíos ha sido, y es, lograr captar y mantener el interés y atención de los niños. Sin embargo, esto no debe plantearse como un ejercicio complicado, según la psicóloga infantil colombiana y, experta en educación familiar, Ángela Bernal, “hoy los niños son más protagonistas de su proceso si les permitimos integrar el conocimiento con la experiencia, por eso las herramientas tecnológicas son un gran aliado para enfocar el aprendizaje bajo estructuras de juego”.
3. Cooperar con otros profesores como un requisito esencial
En todos los equipos es imprescindible contar con nexos de unión que permitan intercambiar conocimientos e ideas, aún más en el sector de la enseñanza, un área en constante evolución y desarrollo que siempre está nutriéndose de nuevos conceptos. Por ello, uno de los elementos clave que han asumido los profesores este año ha sido el apoyo de herramientas internas que les han facilitado una mayor coordinación, transmisión de experiencias, recursos, materiales; es decir, todo aquello que sirva para mejorar la experiencia de aprendizaje en cualquier entorno. “ A todos los profesores nos tomó por sorpresa la virtualidad en el aprendizaje, por eso ha sido fundamental compartir experiencias con otros pedagogos. Cuando empezamos la virtualidad no contábamos con mucho tiempo para preparar las clases y eso nos ha llevado a compartir material, herramientas y recursos. Este ha sido un tiempo para entender las nuevas herramientas, superar la frustración de los niños y la propia y, hacer divertido el proceso, no solo del aprendizaje, sino también del manejo de emociones en el aislamiento social., Ha sido un recorrido largo en el que la experiencia compartida ha sido vital y estimulante”,. Agregó Myriam Suárez, Psicóloga y directora del Jardín infantil un Mundo por Crear, con 35 años de funcionamiento y asesora en pautas de crianza y dificultades de comportamiento.
4. Organizar contenidos para facilitar el acceso a los estudiantes
Una organización de contenidos que facilite su acceso de manera habitual es una clave fundamental tanto para profesores como para estudiantes; aún más durante un año en el que el acceso a estos materiales y recursos ha debido hacerse de forma completamente digital. Por ello, ha sido fundamental establecer sistemas de gestión y organización que fuesen lo suficientemente útiles y claros para que los estudiantes pudieran acceder a la información a través de plataformas y aplicaciones tecnológicas.
5. Fomentar una comunicación fluida con los estudiantes y las familias
La necesidad de establecer nuevos canales de comunicación entre profesores y estudiantes durante el pasado año tuvo como resultado una mayor conexión entre profesores, padres y estudiantes. La alineación de estas tres vías es fundamental para el desarrollo de los estudiantes, ya que una verdadera colaboración entre padres y profesores repercute de manera positiva en el aprendizaje de los propios estudiantes. “Durante este año hemos aprendido a establecer una comunicación más fluida y directa con los estudiantes y las familias”, comenta Fran García, profesor de EFA El Campico, Alicante. “Los mensajes y el contacto era casi diario, lo que ha servido para fortalecer el vínculo de la familia con la escuela y mantenerlo durante este año, facilitando de esta manera el seguimiento y progreso de los estudiantes”, añade.
Un último aprendizaje en el que todos los profesores coinciden, y que se extrapola a cualquier etapa de formación, es la importancia de asumir, tanto por parte del profesor como de los estudiantes, que el proceso de aprendizaje no puede finalizar en una prueba de evaluación. “Hay que trabajar en el empoderamiento de los estudiantes para hacer aflorar sus competencias y que entiendan que el proceso de aprendizaje no puede terminar en el examen”, apunta Jorge García. Para esto, hay que enseñarles y ofrecerles herramientas que les permitan desarrollarse a nivel educacional pero también con vistas a su futuro profesional. En este sentido, la tecnología es un elemento clave en este proceso, en el que los niños trabajarán en competencias que se convertirán en sus habilidades profesionales futuras, brindándoles fluidez digital y abriendo nuevas oportunidades. Por este motivo, es imprescindible impulsar la incorporación de la tecnología y la digitalización de los centros educativos para mejorar, no solo la educación a distancia, sino también el sistema educativo en general.