Ervin Liz, exalumno colombiano del Bachillerato Internacional (IB), cofundó la empresa Colombian Coffee Connection. Mediante el comercio ético directo, la empresa importa a EE. UU. café fresco orgánico especial cultivado por agricultores indígenas de la etnia nasa en Colombia.
Ervin decidió cursar el Programa del Diploma (PD) del IB mientras estudiaba en el United World College (UWC) Red Cross Nordic (Noruega). La combinación del currículo del IB y el programa del UWC lo motivó como nunca antes lo había estado en su vida. El programa le ayudó a desarrollar la creatividad, una mentalidad abierta y la disposición para experimentar y explorar. Ha aprovechado estas habilidades en la universidad y en la vida, lo que le ha otorgado una ventaja competitiva en distintas áreas, tales como la escritura creativa, el comercio y los negocios.
Colombian Coffee Connection es una empresa dedicada a la torrefacción e importación de café especial con oficinas centrales en Hutchinson, Minnesota (EE. UU.). “Actualmente también vendemos café en Bogotá. John Backlund (mi socio comercial) y yo fundamos CCC en 2017, con el objetivo de importar a EE. UU. el café orgánico especial más fresco que cultivan en Colombia los agricultores indígenas de la etnia nasa. Además de prestar especial atención a la calidad, también nos preocupamos por practicar un comercio ético directo y por retribuir a la comunidad lo que nos ha dado”, afirmó Ervin Liz.
El comercio ético directo significa que Colombian Coffee Connection compra directamente de los agricultores y les paga por su cosecha hasta un 200 % más que el precio de mercado. Para retribuir lo que reciben, su iniciativa Coffee With Heart (café con corazón) dona el 10 % de las ganancias para financiar proyectos humanitarios que benefician a los ancianos indígenas de la comunidad agrícola. Hasta ahora han construido dos proyectos de vivienda por medio de esta iniciativa.
“Mi conclusión a día de hoy es que se puede ejercer un impacto positivo de muchas maneras y a distintas escalas”, declaró Ervin Liz. “Si quieres ayudar a las personas realizando proyectos locales a gran escala, fantástico; si decides ayudar a tu vecino o a las personas de tu pueblo o ciudad, también es fantástico. En mi opinión, lo importante es hacer las cosas con amor, dedicación y compasión”.