Mapear el talento, construir un clima laboral idóneo y promover el conocimiento propio son algunos de los consejos para afrontar estas crisis.
“Es conveniente contar con los recursos necesarios para prevenir la baja motivación laboral, con diversos recursos para analizar el clima laboral y preocuparse por la situación de cada empleado”, asegura Lorena Montespier, experta en Talento Humano de Nawaiam.
Lorena Montespier, experta de la compañía argentina de gamificación para el Talento Humano -Nawaiam- y Directora de Bienestar y Felicidad en la misma empresa, brinda seis consejos para saber afrontar una crisis profesional o laboral de los colaboradores como compañía y salir exitoso de esta. En primer lugar, es importante identificar qué es una crisis profesional o laboral y cuándo se está entrando en ella. En este caso, una crisis profesional o carrera se refiere a una desmotivación por la carrera o tareas que se realizan, emociones negativas en el trabajo o con un equipo de trabajo, que llevan a las personas a reflexionar sobre el sentido de ese trabajo u oficio y la necesidad de dejarlo.
Según Montespier es clave identificar cuáles son los síntomas para identificar una crisis laboral. En ese sentido, una de las principales características de estas crisis es la desmotivación laboral, la cual es una amenaza constante para las organizaciones y consiste en un desinterés o insatisfacción progresivo en el puesto de trabajo. Por ende, puede causar que el personal se sienta frustrado, sin motivación en el trabajo y, que por tanto, no ofrezca todo el rendimiento que podría aportar.
Sin embargo, “la baja motivación puede presentarse en cualquier momento”, asegura la Directora de Bienestar y Felicidad de Nawaiam. “Por eso, es conveniente contar con los recursos necesarios para prevenirla, como es el caso de las encuestas con las que se puede analizar el clima laboral y preocuparse por la situación de cada empleado. Este tipo de encuestas, nos permite escuchar, informar y evaluar a todo el equipo”. En general, la desmotivación en el trabajo son las siguientes: falta de reconocimiento, perspectivas y realidades diferentes, errores en la comunicación, el salario emocional, estancamiento de plan de carrera y/o futuro laboral y por supuesto, un clima negativo de equipo.
Por otra parte, y en segundo lugar, después de identificada una crisis, ¿cómo las compañías pueden afrontar las crisis laborales de sus equipos de trabajo? ¿Cómo motivar a un empleado desmotivado? Estas son seis acciones que la compañía también señala que pueden tomarse:
1). Mapear el talento humano. Este es un recurso que permite a la organización ser consciente de las habilidades y aptitudes profesionales de sus empleados y que hoy en día se puede hacer con herramientas lúdicas interactivas mediante gamificación, como lo hace Nawaiam que permite a los equipos de trabajo identificar claramente el perfil conductual de cada persona, por medio de un videojuego. Con esta base se puede evitar ocuparlo en tareas que no correspondan con su área de interés o gusto, previniendo que pueda llegar a frustrarse. Nawaiam ayuda a las organizaciones a encontrar el mejor talento para esa posición buscada sin ningún tipo de sesgo.
A su vez, toda esta información contribuye a desarrollar planes de carrera personalizados para que pueda seguir creciendo dentro de la organización y, así, evitar que experimente estancamiento o se produzca una fuga de talento.
2) Construir un clima laboral idóneo es fundamental. Si el ambiente de trabajo es grato, flexible en algunos aspectos, orientado a evitar el estrés laboral y con las facilidades necesarias para el trabajo, será mucho más sencillo que el empleado se sienta motivado. Si no, probablemente no sienta mayor compromiso profesional y se interese por buscar otras opciones.
3) Valorar el esfuerzo de los colaboradores. A través de un plan de incentivos, la compañía puede establecer estrategias mediante objetivos o metas concretas para motivar la productividad y, a su vez, hacerle saber a los empleados que su trabajo es estimado y reconocido.
4) Realizar una evaluación y revisión constante del clima laboral, ya que este puede entenderse como un ecosistema frágil. De manera que conviene que la organización esté atenta a cuanto ocurre en él.
5) La proyección y ambición. Esto no solo se trata de tener un buen clima laboral, recompensas adecuadas, un salario emocional bien implementado sino un plan que fomente la trayectoria profesional y la motivación en los empleados.
6) La importancia del conocimiento propio para evitar las crisis laborales o profesionales. Por último, la experta de Nawaiam recalca que hay que promover el conocimiento propio dado que, “conocerse nos permite trabajar sobre nosotros mismos, nos cambia los prejuicios y sin lugar a dudas, los sesgos. Conocerse permite que podamos ser aun más inteligentes a la hora de accionar con un tema tanto personal como profesional y por supuesto, a relacionarnos mejor con nuestro entorno”.
“Cuando reconocemos nuestras fortalezas y nuestras áreas a mejorar, se abren nuevas puertas porque salimos de nuestra zona de comfort, aprendemos a ser más humildes y a incorporar conceptos nuevos y erradicar conceptos mal aprendidos. Lo anterior, nos traslada a un profundo lugar sincero, genuino y nos acercamos mucho más a nuestro propósito y nuestra misión de vida. No es algo inalcanzable o solo un sueño, es maravilloso saber hacia donde ir y buscar las herramientas para lograrlo”, afirma Montespier.