Las empresas de servicios públicos se encuentran constantemente en la búsqueda de estrategias que permitan incrementar la agilidad y la eficiencia de sus operaciones. De igual forma, estas compañías dan una alta importancia a la adopción de nuevas tecnologías que contribuyan con la reducción de costos sin afectar el dinamismo de sus negocios. En este contexto, las soluciones en la nube se han convertido en una de las herramientas más efectivas a la hora de lograr estos objetivos.
Las soluciones en la nube son un recurso tecnológico que permite almacenar y gestionar datos a través de la red y de proveedores remotos que hacen parte de una infraestructura virtual más flexible, instantánea y accesible. De esta forma, las organizaciones pueden reducir costos y esfuerzos de TI relacionados con el mantenimiento del software, de los sistemas operativos y de la infraestructura tecnológica; de igual forma, no tiene que preocuparse por la administración de servidores o bases datos, lo que les permite emplear estos recursos en procesos de misión crítica que generen valor y mejoren la experiencia de sus clientes.
De acuerdo con Gartner, empresa de investigación y asesoría en temas tecnológicos, alrededor de 302,5 billones de dólares se invertirán en soluciones en la nube para el 2021. Este dato, evidencia la evolución que las organizaciones están experimentando en términos de adopción de soluciones en la nube y la importancia que tiene contar con herramientas efectivas y menos costosas que puedan soportar altos flujos de datos.
Según Jesús Sánchez, Vicepresidente de Mercadeo de Open: “Actualmente, uno de los grandes retos de la industria de las utilities es encontrar soluciones que les permitan agilizar sus procesos con el fin de darle un manejo más eficiente y dinámico a todo lo que tiene que ver con los puntos críticos del negocio. Sin duda, la adopción de soluciones en la nube satisface estas necesidades y además generan una reducción importante en los costos de tecnología de soporte”.
En el mercado pueden encontrarse soluciones en la nube como Open Smartflex, la cual contribuye con la automatización de distintas áreas de negocio de las utilites a través de una suite de funcionalidades que permite optimizar los procesos comerciales y operativos de estas compañías de manera integral.
Ventajas del almacenamiento en la nube
La gran ventaja de las soluciones en la nube es que permiten establecer y gestionar procesos a través de una infraestructura TI basada en la web. De esta manera, se pueden almacenar grandes volúmenes de información en la red sin la necesidad de contar con servidores o plataformas físicas que obliguen a las organizaciones a incurrir de manera constante en altos costos de mantenimiento y soporte.
Parte de este ahorro se da gracias a que los proveedores de soluciones en la nube son los encargados de generar oportunamente las actualizaciones, el mantenimiento y soporte de estas plataformas. Por lo tanto, las compañías no deben ocuparse directamente de garantizar su debido funcionamiento; permitiéndoles enfocarse en estrategias que contribuyan a aumentar la rentabilidad de su negocio.
Según Sánchez, “las soluciones cloud representan una movida estratégica para las empresas que deseen obtener inversiones de mayor retorno, al reducir los costos en infraestructuras de datos físicas o servidores de alto valor monetario”.
La tecnificación de procesos relacionados con el almacenamiento de información que permiten el fácil acceso a un gran volumen de datos desde cualquier lugar y hora se ha convertido en otra de las grandes ventajas de las soluciones cloud.
De la misma forma, la capacidad de almacenamiento ilimitado que ofrecen la mayoría de estas plataformas cloud permite que las organizaciones tengan un esquema más práctico a la hora de guardar y gestionar la información más relevante de sus diversas áreas. De esta manera, la reducción del costo de mantenimiento y la disminución de los tiempos de instalación y configuración son otras de las ventajas por las que las empresas de servicios públicos se están moviendo a cloud.
Según datos de la OCDE, el impacto que ha tenido el uso de los servicios de Cloud Computing ha representado un ahorro del 1 % del PIB en los países pertenecientes a esta organización, puesto que el porcentaje de compañías que utilizan los servicios de Cloud pasó del 10% al 65%, lo que también implica una disminución de la inversión en equipos de tecnología y comunicaciones.
Estas soluciones se posicionan como una herramienta tecnológica avanzada, que contribuye a la transformación digital de las compañías, así como a la maximización de su rendimiento, ofreciendo un proceso de implementación ágil y sencillo, actualizaciones continuas y disminución de costos de operación de TI.