El año 2020, marcado por la pandemia, la transición masiva al teletrabajo y la comunicación en línea resultó inusual en muchos sentidos, lo que se refleja en las estadísticas de spam y phishing durante esos doce meses. Los ciberdelincuentes utilizaron al máximo el COVID-19 como cebo para sus campañas y todo apunta a que esta tendencia se mantenga en 2021.
También es previsible un aumento de los ataques dirigidos al sector empresarial en 2021, ya que el teletrabajo genera mayor vulnerabilidad en los empleados. Así mismo, los usuarios de sistemas de mensajería deben mantenerse alerta, ya que es probable que también se incremente la cantidad de spam y phishing dirigido a dispositivos móviles.
Según nuestro Informe de Spam y Phishing 2020, México pasó del penúltimo lugar en el Top 10 mundial al séptimo puesto, situándose a la cabeza de los países latinoamericanos receptores de correos maliciosos (con archivos adjuntos maliciosos o enlaces a sitios de phishing). Según la reciente investigación que toma en consideración los datos anuales, el 3,34% de los usuarios de las soluciones de seguridad de Kaspersky que recibieron este tipo de mensajes en su correo electrónico eran mexicanos. A nivel regional, le sigue de cerca Brasil con 3,33%. El Top 3 global está encabezado por España (8,48%), Alemania (7,05%) y Rusia (5,87%).
El año pasado, la proporción de spam sobre el tráfico de correo global disminuyó en comparación con el año anterior, y su promedio mensual fue del 50,37%. Esto puede deberse a la transición hacia el teletrabajo y, en consecuencia, a un aumento en el volumen de correspondencia legítima.
Para Carlos Linares, gerente de producto de Kaspersky en Nexsys de Colombia, «los usuarios estamos expuestos a muchas amenazas cibernéticas y es claro que hemos tenido sensibilización con respecto al tema pero aún nos falta tener más conciencia con respecto a la seguridad de nuestros datos. Por ello es importante contar con soluciones especializadas en protección».
Para mantenerse protegido, le recomendamos lo siguiente:
• Preste mucha atención y no abra ningún archivo o adjunto sospechoso recibido de fuentes desconocidas. Revise el formato de la URL y la ortografía del nombre de la empresa antes de descargar cualquier cosa. Los sitios web falsos pueden parecerse a los reales, pero habrá anomalías que le ayudarán a detectar la diferencia.
• No descargue e instale aplicaciones de fuentes no fiables.
• No haga clic en ningún enlace recibido de fuentes desconocidas y en anuncios online sospechosos.
• Cree contraseñas fuertes y únicas, incluyendo una mezcla de letras minúsculas y mayúsculas, números y puntuación, y active la autenticación de dos factores.
• Instale siempre las actualizaciones. Algunas de ellas pueden contener correcciones de problemas críticos de seguridad.
• Ignore los mensajes que solicitan la desactivación de los sistemas de seguridad para el software de oficina o el software antivirus.
• Utilice una solución de seguridad robusta apropiada para su sistema y dispositivos, como Kaspersky Internet Security o Kaspersky Security Cloud. Le indicará qué sitios no deben estar abiertos y le protegerá del malware.