97% de los millennials considera que un líder es aquel que motiva

Un reciente estudio de Right Management dio a conocer cuáles son las principales características que identifican a un líder millennial, sus principales habilidades y los aspectos que tienen presente a la hora de tomar decisiones. Para 2020 esta generación constituirá más de una tercera parte de los profesionales a nivel mundial.

Se sabe que un líder no es un jefe, sino aquella persona que hace que la gente vaya a lugares a los que no irían solos. Pues bien, los millennial lo tienen claro: para ellos un líder es aquel que motiva (97%), inspira (91%) y crea equipo (87%).

Desde el concepto básico de liderazgo, visto como un conjunto de habilidades gerenciales donde un individuo puede influir en el actuar de un grupo de trabajo para darle cumplimiendo a objetivos, Right Management se dio a la tarea de analizar el comportamiento de aquellos que están gestionando equipos en la actualidad a través de la encuesta Líderes Millennial: Horizonte 2020. Valores, propósito, aspiraciones, desarrollo y carrera.

De acuerdo a Patricia Vargas Rojano, Gerente de Right Management Colombia: “la rápida evolución de la sociedad y del entorno profesional marcada por la revolución tecnológica, junto con las nuevas necesidades y demandas de las distintas generaciones en el mercado laboral, están redefiniendo la relación empleado-empleador. Por eso, en el momento en el que hablan de liderazgo, los líderes millennial se perciben absolutamente diferentes a sus jefes: para ellos un líder motiva, inspira y crea equipo”.

Además de las tres características mencionadas, los millennials ven en el líder a esa persona que impulsa el cambio (65%), dirige (48%), y distribuye los recursos (45%) y cambia el statu quo (28%). Con menor porcentaje se encuentran aquellos que opinan que el líder da instrucciones (21%), cumple instrucciones (3%), tiene un cargo directivo (3%), tiene un cargo superior en la organización (3%), es el máximo responsable de una empresa (2%) y gana más dinero (1%).

Es claro entonces que vivimos en una nueva Human Age, donde el liderazgo y la gestión del talento se han convertido en un elemento de diferenciación y en un motor de crecimiento para los modelos de negocio en las organizaciones, donde las nuevas generaciones priorizan un liderazgo más inspirador, orientado a las personas frente a los modelos directivos tradicionales.

Y aunque estos nuevos líderes han entrado al mundo laboral en un punto donde el mercado se encuentra en recesión con récords de desempleo juvenil y ciclos económicos volátiles, se caracterizan por ser personas que están abiertas a la diversidad (74%), aprecian la conciliación (73%) y se sienten bien formadas (68%).  La visión que tienen de ellos mismos también destaca aspectos como: nos gusta crear (63%), tenemos un ritmo de vida rápido, somos impacientes y necesitamos un cambio continuo (58%), somos proclives a la movilidad laboral (54%) y somos emprendedores (51%).

Y es que a pesar de las múltiples versiones que aseguran que los millennials son inconstantes y que les gusta el cambio, los resultados del estudio muestran que el 80% de ellos están satisfechos con su compañía actual y que la mayoría tiene intención de permanecer en la empresa por más de dos años. Ahora bien, a la hora de tomar decisiones en la ejecución de su labor, los millennials tienen en cuenta los objetivos de la organización (84%), el impacto en su equipo (82%), el impacto en los clientes (69%), el impacto en los demás (63%) y sus propios valores (65%); definiéndose así como una generación de líderes comprometidos especialmente con la organización, con las personas, y con sus propios valores.

El modelo de Liderazgo eficaz P3 de Right Management (personas, propósito y performance), que se agrupa en tres clusters: Liberar el talento, acelerar el rendimiento y atreverse a liderar, tuvo incidencia en el estudio a la hora de definir cuáles son las habilidades clave del liderazgo para los millennials. Los resultados arrojaron que construir confianza (83%), impulsar la colaboración (76%), mostrar humildad (74%), inspirar y movilizar la organización para la transformación (74%), promover el feedback (73%) y potenciar el desarrollo de la carrera profesional de los demás (71%) son las habilidades más importantes dentro de su visión.

“La humildad, habilidad que ocupó el tercer lugar dentro de la percepción de los millennials, es una de las más importantes. Para ser un buen líder se debe aprender a ser humilde. Esta persona no solo es más apreciada, sino que también es más eficiente pues desarrolla una capacidad de reconocer sus errores, resaltar el potencial de sus subordinados y dar buen ejemplo”, enfatiza Vargas Rojano.