Según datos recientes de Positive Technologies, el 98% de las empresas en todo el mundo ha sido objeto de al menos un intento de ataque cibernético.
La ciberseguridad se ha convertido en una prioridad para las organizaciones a nivel global. Enfrentar situaciones de riesgo en el ámbito digital requiere de acciones decididas y preventivas. De acuerdo con datos de Positive Technologies, el 98% de las empresas en todo el mundo ha sido objeto de al menos un intento de ataque cibernético. Esta cifra pone de manifiesto la urgente necesidad de fortalecer las defensas digitales y mantener una vigilancia constante frente a las crecientes amenazas en el entorno digital actual.
Hoy en día, las empresas que no han desarrollado un plan de acción para mitigar los efectos de un ataque cibernético se encuentran en clara desventaja. Estos ataques no solo comprometen la operatividad de las organizaciones al generar interrupciones, fallos en los servicios esenciales como la energía y retrasos en la cadena de suministro, sino que también ponen en riesgo datos confidenciales, minan la confianza de los clientes y afectan de manera irremediable la reputación empresarial.
Ante esta situación, Schneider Electric subraya la necesidad de que las organizaciones inviertan en tecnologías avanzadas de seguridad informática y sistemas de detección de riesgos. Estas herramientas permiten anticiparse a posibles amenazas y proteger los activos digitales de manera efectiva. Dada esta realidad, la compañía destaca la importancia de la formación y concientización de los empleados sobre prácticas seguras en línea, como parte fundamental de una estrategia de ciberseguridad.
La compañía ofrece soluciones innovadoras como EcoStruxure Plant, una arquitectura de sistema abierta e interoperable, diseñada para la industria del Internet Industrial de las Cosas (IIoT). La herramienta ayuda a las industrias a maximizar la eficiencia de sus procesos y a tener un control en tiempo real de variables críticas, como el riesgo de seguridad, el riesgo de ciberseguridad, la rentabilidad operativa y el riesgo de confiabilidad. En el contexto del IIoT, la seguridad cibernética se convierte en una prioridad, garantizando que todos los procesos estén adecuadamente protegidos.
«En Schneider Electric, la ciberseguridad es un pilar fundamental de nuestra cultura corporativa. No solo verificamos de manera constante la efectividad de nuestros protocolos de respuesta ante incidentes, sino que también invertimos en tecnologías avanzadas como el IIoT y la inteligencia artificial para anticiparnos a las amenazas. Estas herramientas nos permiten identificar riesgos emergentes en tiempo real, manteniéndonos a la vanguardia en ciberseguridad y asegurando la protección integral de nuestros clientes, sus datos y nuestros activos digitales», afirmó Sebastián Giraldo, director de innovación digital y tecnología para SAM.
Además de la adopción de tecnología y protocolos internos, la colaboración entre sectores es clave. Schneider Electric hace un llamado a la industria, el Gobierno Nacional y el sector académico a trabajar en sinergia para desarrollar iniciativas que permitan combatir la delincuencia cibernética de manera eficaz. En Colombia, esta colaboración ya ha dado frutos con la creación de la CyberOnCommunity, una alianza estratégica entre empresas como Schneider Electric, Fortinet, ClaroTY, Lenovo y Stefanini Group, junto al Ministerio de Tecnologías de la Información y Comunicaciones (MinTIC). El objetivo de esta comunidad es reducir los niveles de ataques cibernéticos en el país.
Con esta visión estratégica y una firme apuesta por la innovación tecnológica, Schneider Electric reafirma su compromiso de seguir liderando en el ámbito de la ciberseguridad, protegiendo los activos digitales de sus clientes y construyendo un futuro digital más seguro y resiliente para todos.