La empresa fabricante de soluciones de energía confiable anticipa cuáles son los factores que impulsarán la evolución de Edge Computing este año y qué beneficios concretos pueden obtener las organizaciones.
Forza Power Technologies realizó un análisis sobre cómo el Edge Computing se desarrollará este año, cuáles los sectores donde tendrá mayor crecimiento y qué beneficios brindará su adopción a las organizaciones.
“Para este 2023 en todo el mundo, incluida Latinoamérica, se prevé una constante evolución en Edge Computing. Algunos de los estudios estiman que a nivel mundial, el 50% de las nuevas infraestructuras de TI empresariales serán de equipamiento al borde”, dijo Erika Puerta, Territory Manager para Cono Norte de Forza Power Technologies, quien agregó: “En Latinoamérica ya se ha empezado a generalizar el uso de la computación perimetral en algunos sectores como el financiero, comercio o hasta en aplicaciones para ciudades inteligentes”.
De acuerdo con los expertos de Forza, este año que inicia se verá un crecimiento acelerado del Edge Computing en nuevos sectores y esto estará marcado por las siguientes cinco tendencias:
Edge as a service: para muchas organizaciones, crear su propio Edge desde cero puede ser costoso o tomar mucho tiempo. Por esto, en 2023 vamos a ver crecer el EaaS (Edge as a Service) como solución de las empresas de telecomunicaciones en la región que han venido desplegando su infraestructura en los últimos años y permiten a las organizaciones responder más rápidamente a necesidades del borde.
Edge para agricultura: uno de los sectores donde se verá mayor crecimiento en la computación perimetral será en la agricultura, tanto para grandes cultivos como para medianos. Esto, debido a la optimización de riego, insumos e identificación de plagas, que se pueden realizar de manera más efectiva con la integración de sensores IoT y aplicaciones al borde. Este avance permitirá tanto una reducción de costos como una mayor sustentabilidad en los cultivos.
Hipercrecimiento en datos: con mayores despliegues de Edge, se verá en 2023 un mayor crecimiento de datos no estructurados, a nivel de 175 o 180 zettabytes. Actualmente, esta información se lleva sin procesar a los centros de datos o la nube, lo que incrementa los costos de transferencia, almacenamiento y procesamiento. Parte de lo que veremos en 2023 es el procesamiento de algunos de esos datos en el Edge, como un filtro para evitar la transferencia de datos no necesaria y para hacer más eficiente el uso de recursos.
Aprendizaje automático en Edge: varios de los despliegues de IoT y autonomía requieren que haya la menor latencia posible. Aquí, el Edge seguirá evolucionando para poder tener un aprendizaje in-situ que le permita no solo acumular datos sino identificar tendencias y tomar acción.
Zero trust en Edge: el borde se está convirtiendo en un objetivo atractivo para los actores de amenazas, por lo que se hace necesario el despliegue de herramientas de ciberseguridad. En este sentido, empezaremos a ver a IA aplicada a la seguridad perimetral y el aislamiento de datos en el Edge para su protección ante ataques externos.
“Como queda claro, el despliegue en Latinoamérica de soluciones Edge se verá en distintos sectores e industrias. Hay que considerar que esta tecnología también puede ayudar a diferentes empresas a resolver sus necesidades de eficiencia energética en centros de datos y redes convergentes. Para eso, Forza cuenta con equipos especializados en el respaldo y adaptados al espacio restringido del Edge, que permiten escalar y realizar una gestión remota”, indicó Erika Puerta.