Por: Leonardo González, director de ventas para el Norte de Latinoamérica, VMware
Recientemente leí un informe en el cual se comentaba que el aumento en el rendimiento de los empleados y la confianza establecida en los nuevos modelos de trabajo híbridos podrían verse amenazados por un incremento en la implementación de medidas de control remoto.
El estudio, «The Virtual Floorplan: New Rules for a New Era of Work», realizado por Vanson Bourne en nombre de VMware, encontró que el 70% de las empresas encuestadas ya implementaron o planean implementar medidas de vigilancia de los empleados para monitorear la productividad de los empleados en este nuevo entorno de trabajo híbrido.
Entre estas organizaciones, las medidas que se están tomando incluyen el monitoreo de correos electrónicos (44%), navegación web (41%) y herramientas de colaboración (43%), así como videovigilancia (29%), seguimiento de atención a través de cámaras web (28%) y software de registro de uso del teclado (26%). Sin embargo, el 39% de las empresas que ya han implementado el monitoreo de dispositivos y el 41% de las empresas que actualmente están en proceso de hacerlo, de hecho están viendo un «aumento drástico» o «aumento» de la rotación de empleados.
Una de las reflexiones que me dejan estos hallazgos es que se debe lograr un delicado equilibrio entre la productividad, vigilancia y confianza, a medida que las empresas buscan nuevas formas de evaluar el desempeño de los empleados, más allá de la presencialidad.
Desde la perspectiva de los empleados, tres cuartas partes (75 %) están de acuerdo en que pasar a un entorno de trabajo distribuido ha significado que sus empleadores valoran más su desempeño, y no las métricas tradicionales como el tiempo que pasan en la oficina. Y el 79% de los empleados está de acuerdo en que las tecnologías de trabajo remoto les han permitido trabajar de manera más eficiente. El 74% de las organizaciones han tenido que desarrollar nuevas formas de medir la productividad de los empleados. Entre estas organizaciones, el nuevo enfoque para monitorear la productividad se ha logrado mediante el uso de soluciones centradas en el desempeño, que incluyen ponerse al día con los gerentes para analizar las cargas de trabajo (55 %), evaluar los resultados y los entregables acordados (53 %) y usar la nueva gestión de proyectos de software (47%).
Si bien casi seis de cada diez (59 %) empleados reconocen que su organización ha tenido que desarrollar nuevas formas de monitorear la productividad como parte del cambio hacia el trabajo híbrido, la transparencia sigue siendo fundamental. Una cuarta parte de los empleados (24 %) no sabe si su organización ha implementado sistemas de monitoreo en sus dispositivos para monitorear su productividad.
Desde mi perspectiva, el cambio en los modelos de trabajo han traído grandes beneficios, tanto para los empleadores como los colaboradores, en especial aquellos empleados del conocimiento.
La tecnología existe (ambientes multicloud, modernización de aplicaciones, seguridad, colaboración), así como las regulaciones. Por ejemplo, en Colombia desde el 2008 existía la Ley 1221 que definía el Teletrabajo y, el gobierno acaba de expedir el Decreto 555 del 9 de abril de 2022, que reglamenta la Ley 2069 de 2020 (Ley de Emprendimiento) y la Ley 2121 de 2021 (Ley de Trabajo Remoto). En esta modalidad, el empleador y trabajador no interactúan físicamente; desde su inicio hasta su terminación, se realiza de manera remota mediante la utilización de tecnologías de la información y las telecomunicaciones u otro medio.
Es de anotar, que según la Organización Internacional del Trabajo (OIT), con anterioridad a la emergencia de la pandemia por COVID-19 algunos países de la región ya contaban con la legislación sobre el teletrabajo. Perú legisló sobre esta materia en el año 2013. Brasil en 2017 modificó la Consolidación de la Legislación del Trabajo (CLT) incorporando un capítulo sobre el teletrabajo. Costa Rica reguló el teletrabajo en 2019. Durante el año 2020 otros países avanzaron en este sentido: México, Panamá, El Salvador, Chile y Argentina. En Uruguay, en abril de 2020 ingresó a la Cámara de Senadores un proyecto de ley de teletrabajo, el cual recibió media sanción en octubre de ese año. Paraguay sancionó en junio de 2021 la ley de teletrabajo.
Con esto quiero decir que la legislación existe así como las herramientas del espacio de trabajo digital, que permiten que las personas trabajen desde cualquier lugar y esta investigación muestra que los empleados se sienten más valorados y confiables, pero esto es parte de una transformación, no solo digital, sino cultural.
Por ello, como líderes de las organizaciones y en cada área, debemos velar por el bienestar de los empleados, la mejora en la productividad y permitir que la tecnología facilite esta transición hacia modelos de trabajo en la nueva era digital.
Fuente: https://news.vmware.com/releases/virtual-floorplan
Fuente externa: https://www.ilo.org/wcmsp5/groups/public/—americas/—ro-lima/documents/publication/wcms_811301.pdf