Superar la fragmentación: el desafío clave para optimizar la inteligencia artificial a nivel global

Migración a la nube, colaboración empresarial y lineamientos internacionales, los pasos claves para maximizar el impacto de la IA.

El mundo está atravesando épocas de cambio, con una fragmentación que cada día se hace más evidente entre naciones, bloques económicos y al interior de las mismas sociedades. En este entorno, la inteligencia artificial (IA) representa una esperanza compartida para impulsar el progreso global. Sin embargo, el impacto positivo de la IA está siendo limitado por las barreras creadas por divisiones internas en las sociedades y entre naciones. Esta es una de las conclusiones de Christian Klein, CEO y miembro del Consejo Ejecutivo de SAP SE, tras su participación en la última edición del Foro Económico Mundial de Davos (Suiza), en la que el ejecutivo destacó además que superar esta fragmentación es esencial para liberar el verdadero potencial de la IA.

“La IA puede ser un catalizador para la productividad, la resiliencia económica y la sostenibilidad, pero su éxito depende de nuestra capacidad para trabajar juntos más allá de fronteras y limitaciones”, afirma Klein, quien explica que en un mundo fragmentado, la IA no puede prosperar como debería.

Tres pasos clave para maximizar el impacto de la IA

El desafío de maximizar el impacto de la IA requiere de un enfoque progresivo. El primer paso comienza a nivel empresarial con la adopción de la nube. Como destaca, la nube permite que los datos sean accesibles de manera más eficiente y que las innovaciones en IA se integren rápidamente en los procesos de negocio. “La migración a la nube crea un entorno estandarizado, donde los datos son coherentes y estructurados para aplicaciones de IA. Esto es esencial para maximizar el impacto de estas tecnologías en las empresas”, asegura. Además, subrayó que la nube facilita la actualización automática con las últimas innovaciones, manteniendo a las empresas en la vanguardia tecnológica.

Las inversiones en tecnologías como la nube están marcando el camino para optimizar la IA. De acuerdo con la encuesta Cloud and AI Business Survey 2024 de PwC, el 63% de las empresas de alto rendimiento están aumentando sus presupuestos en la nube para aprovechar la inteligencia artificial generativa (GenAI).

El segundo paso es fomentar ecosistemas industriales robustos que promuevan la colaboración entre empresas. En la era de la IA empresarial, es fundamental que las organizaciones puedan compartir información de manera segura con proveedores, clientes y socios de innovación. “Los ecosistemas industriales bien conectados generan un impacto exponencial. Cuanta más información se comparta entre las empresas, mayores serán los beneficios en términos de competitividad e innovación,” agrega Klein. Estos ecosistemas también mejoran la capacidad de las organizaciones para responder a crisis globales, como interrupciones en el comercio o desastres naturales.

Finalmente, el tercer paso es construir marcos internacionales que permitan a la IA prosperar de manera responsable. En este punto se destaca la importancia de que los gobiernos y reguladores reduzcan las barreras innecesarias al intercambio de datos, tanto a nivel nacional como internacional. “La alineación de regulaciones tecnológicas entre potencias económicas como América del Norte, Europa y China puede acelerar significativamente la innovación en IA”, explica. Asimismo, los acuerdos globales deben centrarse en el uso ético y seguro de los datos, construyendo un marco de confianza entre los actores involucrados.

El papel de la confianza y la inversión en la nube

Uno de los mayores obstáculos para el avance de la IA es la falta de confianza, tanto entre países como entre las propias empresas. Ante esta falta de confianza Klein propone los “las confederaciones de confianza” (confederations of trust), en las que las organizaciones acuerden reglas comunes sobre privacidad y uso de datos, las cuales son esenciales para fomentar la colaboración. “La confianza es la base para superar la fragmentación global. Sin ella, los esfuerzos para maximizar el impacto de la IA están condenados a quedarse cortos”, afirma.

Para lograr armar lo que Klein define como el rompecabezas de la IA, es necesario tener ecosistemas globales basados en la confianza que reduzcan la fragmentación y permita que las organizaciones puedan aprovechar al máximo los beneficios de esta tecnología.

“Nos corresponde a nosotros armar el rompecabezas de la IA y reducir la fragmentación, paso a paso. Así es como maximizamos el potencial de la IA, no solo para algunos, sino para muchos”, finaliza el CEO de SAP.