Los ganadores de la pandemia están en la nube

Por: Alejandro Laverde, Country leader SoftwareONE Colombia

La crisis sanitaria aceleró la adopción tecnológica planeada para tres años en un tiempo récord de seis meses, por lo que se puede llegar a pensar que la pandemia fue el detonante del uso de la nube en las compañías. En realidad, la nube ya era utilizada tanto en el sector empresarial como de forma personal antes de este evento, aunque sin duda fue un detonante para su adopción masiva como punto de partida para mejorar el trabajo en las empresas. De hecho, se espera que el mercado de la nube crezca de los 11,400 millones de dólares que tuvo en 2020 a 24,800 millones de dólares para el 2025.

Ha tomado tiempo y esfuerzo, pero ahora la nube es vista por múltiples sectores como una oportunidad de dejar atrás sistemas obsoletos y sustituirlos por tecnologías nuevas. Ante las múltiples limitaciones de la infraestructura tradicional de TI, la adopción de la nube es popular por garantizar una mayor velocidad y agilidad en la forma de trabajo, además de permitir el aumento en la capacidad de procesamiento y almacenamiento de información indispensable en las empresas que son líderes.

Desde mi experiencia en el sector, he presenciado cómo las organizaciones han tenido un crecimiento exponencial con los servicios basados en la nube. Este panorama se amplifica a medida que las empresas se percatan que la actualización de su infraestructura digital es clave para lograr la agilidad necesaria que les permitirá innovar con rapidez y mantenerse al día con las demandas de los consumidores.

Un factor que ha impulsado este crecimiento es el teletrabajo, una modalidad que cambió la forma de trabajar, y a través de la cual se ha acelerado la transformación empresarial. Al final, las compañías se deciden a utilizar la nube por encontrar múltiples beneficios como el almacenamiento de información a bajo costo, protección de datos en tiempo real, simplificación en el intercambio de información, aunque los usuarios estén físicamente en ubicaciones diferentes, todo con una flexibilidad que les permite llevar a cabo una transformación tecnológica más rápida.

Es por eso por lo que las empresas que reaccionaron más rápido y se adaptaron a la nueva normalidad con el uso de la nube, son las que mejores resultados han tenido. En un escenario post-pandemia no se espera que disminuya su uso, sino que será una alternativa cada vez más utilizada para seguir evolucionando los negocios. De hecho, los mayores proveedores de la nube como Microsoft, Amazon Web Services y Google se han centrado en mejorar y ofrecer nuevos servicios para ayudar a sus clientes a continuar con este impulso hacia la digitalización.

La buena noticia es que las empresas ya consideran la implementación de la nube como parte de la estrategia de negocio a corto, mediano y largo plazo, lo que ayudará a construir negocios más productivos y exitosos. El panorama muestra que las empresas continuarán invirtiendo en la nube en los próximos años, priorizando el traslado de su información a un espacio que cuente con la seguridad, disponibilidad y almacenamiento necesario para acceder a ella desde cualquier lugar.

Nadie puede estar seguro de los retos que vendrán en los próximos años, pero sin duda, las empresas a nivel global ya están conscientes de los beneficios de la nube. En el escenario post-pandemia las compañías se encuentran receptivas a implementar metodologías con ayuda de la nube para poder trabajar de forma ágil e integrada.

Es un hecho que la nube es el cimiento sobre el cual los negocios van a crecer. Ahora es el turno de las empresas de llevar a cabo una autoevaluación para demostrar que ya son de las ganadoras o en su lugar comprender por qué aún no se han subido a la nube.